La niebla puede ser una fuente de agua para abastecer a pequeñas comunidades rurales que se encuentran con sequía.
“… La niebla es una nube que está al nivel del suelo, entonces, dependerá de la cantidad de agua que tenga la nube, se espera que en las regiones dónde hay más bosques, más humedad, ahí si tendríamos nieblas que tendrían mayor potencial con el cual colectar agua“. Guillermo Montero Martínez, investigador, Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, UNAM.
Los especialistas indican que sí hay manera de recolectarla.
“… Inició en Los Andes, allá en Sudamérica, y de manera experimental se empezó a probar con diversas mallas las cuales eran redes con hoyos muy pequeños muy finos, en las cuales cuando la niebla llegará a chocar o interaccionar con estas mallas, las gotitas de agua quedaran atrapadas en estas mallas y poco a poco, conforme se fuera saturando está malla esa agua empieza a escurrir”. Guillermo Montero Martínez, investigador, Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, UNAM.
Método para recolectar agua de la niebla
El agua se recolecta a través de mallas para ser almacenada en canaletas.
“… Entonces en la parte baja el agua se va colectando a través de diferentes canaletas y de esa manera se va dirigiendo hacia algún depósito“. Guillermo Montero Martínez, investigador, Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, UNAM.
Sin embargo, atención, el agua de niebla no es potable.
“Aunque estás nubes puedan ser colectadas, esta agua pueda ser colectada, en realidad la formación de nubes depende de la cantidad de aerosoles o de partículas que existen en la atmósfera, es decir, no es agua pura, llevan algún tipo de compuesto o material que va disuelto”. Guillermo Montero Martínez, investigador, Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, UNAM.
Pero sí puede ser potabilizada o utilizarse en otras actividades.
El investigador recuerda que es prioritario cuidar el agua.
“… Cuidar el agua y pensar que no es un recurso que se obtiene simplemente al abrir la llave y nada más el proceso de obtención de agua es muy complejo y muy costoso… entonces, pues, tenemos que cuidar esa agua“. Guillermo Montero Martínez, investigador, Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, UNAM.